ELPERRONEGRO

Cuando me preguntan porque me gustan las motos a mi edad, les respondo - Escucha el ruido del motor, ¿ No esta ahí tu respuesta ? Si no lo entiendes no es mi problema.

Soy un hombre con suerte, porque a mis 61 años aun me queda mucho por lograr y gente con quien disfrutar.

Soy motero, porque me subí en la moto, no hay nada más, ese es todo el secreto de ser motero. Cuando te subes en ella entiendes la importancia , disfrutar y sentir el viento, eso es lo fantástico.

Hoy la crónica la voy a empezar de una manera diferente, la voy a empezar dedicando una mención a Maria Jose, mujer de gran valor, que pese a su mu chismo ¨respeto ¨ a las motos ayer quiso estar en la celebración jubilación de Alberto. Sabe de mi afición a escribir, y por ello se extraño que no le hiciésemos un pequeño pero emotivo discurso a Alberto. Pues bien ,como un martilleo continuo retumban en mi cabeza esas palabras, pues tiene toda la razón. Así que, por su ¨toque de atención ¨ le dedico esta carta abierta a Alberto, pero con la ilusión de que ella nos acompañe mas a menudo.

Jubilado - Se aplica a la persona que está retirada de su trabajo por haber cumplido la edad determinada por la ley o por enfermedad, y cobra la pensión correspondiente:

CARTA ABIERTA A NUESTRO AMIGO ALBERTO.

Nunca se piensa en llegar tan pronto a los 60 años, es como llegar de golpe a una estación, o a un aeropuerto con billete solo de ida, de un largo viaje. ¿Y, ahora que…? Después de tan largo y, de tan corto recorrido llegas a tu destino lleno de vivencias, de experiencia de la vida.Cuarenta años trabajndo en la misma empresa , es la mejor escuela para aprender psicología, para conocer los entresijos del ser humano, y que sería digno de mencionar, de relatar si llega el caso, pero esto sería labor de un libro que esta profesión bien se merece, y que quizá algún soñador como yo pudiera contar algún día.La levedad de la vida a penas nos da tiempo de disfrutar de tanta belleza que nos rodea, de toda la armonía que palpita y que derrocha todo el paisaje, por el que tantos años hemos discurrido. Todas las buenas y malas vivencias, todos los buenos recuerdos de tantas personas que ya desaparecieron , gente trabajadora con los que estabamos unidos amistad y respeto, hacer una foto interna de un tiempo pasado que tiene ineludiblemente la base que a todos nos ha traído hasta aquí.Yo no se si el júbilo del jubilado es tal, si uno no tiene un gran motivo de levantarse de la cama para hacer algo que te ilusione, que tenga un sentido y te llene cada día en ese futuro que ahora empieza, para quien desee revestirse de valor y de rejuvenecimiento. Antes que nos visite esa inexorable dama misteriosa que te obliga a entrar en su morada.Desde esta carta abierta invito a moter@s y no motorist@s, a la ilusión de vivir, de meter en la mochila de la sensibilidad lo mejor de uno mismo, para no dejarse atrapar por esta sociedad tan vacía, tan llena de cosas absurdas que te esclavizan y, que va haciendo víctima de la soledad.

Amigo Alberto

Ahora es un buen momento para saber continuar alegre y feliz, a las puertas de la tercera edad y, que ahora, si nos cuidamos un poco tenemos el premio de una cuarta, siempre que nos aguanten bien la pensión de la seguridad social, por eso se llama seguridad, que además en esta España tan alegre, os quieren contentos y bailarines de salón en los viajes del inserso. Y tu con toda sabiduria no estas deacuerdo. No es una bicoca llegar a jubilado, es un sueño de plenitud. Lo que se pierde en frondosidad se gana en profundidad. Ahora hay tiempo de hacer todo lo que a uno le gusta, viajar por placer, ayudar para sentir el premio que Dios nos da por hacer el bien, por compartir con los nuestros, con más calor esta vida, que no es más que un corto recreo de niños mayores, pero con alma voladora. En fin, querernos algo más sin egoísmos. El dinero no es más que un medio, no el fin de acumular, que de mayores a todos nos gusta demasiado. Es mejor ser que tener, ser rico de corazón, que ser un pobre que sólo tiene dinero, porque al final casi todos nos empeñamos y, a veces lo conseguimos ser los más ricos del cementerio.

Siéntete bien, porque es en este instante cuando por fin vas a recibir la recompensa, de todo el tiempo que te dedicaste a dar lo mejor de ti en el trabajo. Tus compañeros siempre te recordarán por las ganas y el empeño que ponías en hacer las cosas bien. Gracias por ser una persona tan honesta y trabajadora y aquí te dejo una muestra de los nuevos compañeros que fin de semana tras fin de semana están agradecidos de rutear contigo e Isabel. Gracias .

Y ahora nos toca a nosotros acompañarte alla donde tu nos digas.