Gracias a las motos he conocido mucha gente. Algunas
de esas personas han marcado mi vida, otras no, pero con todas ellas, he
compartido grandes momentos. He hecho amigos de rutas, y amigos de los de
verdad. He conocido gente, que agradezco haber conocido, y que sin las motos,
seguramente no habría sido posible.
Gracias a las motos aprendí lo que es un hermano de
verdad, lo que es una hermandad. Cuando uno de los nuestros está en apuros, o
simplemente, lo está pasando mal... ahí estamos, apoyando a nuestro hermano
motero, no dejándole solo. Los moteros no sólo nos juntamos cuando vamos en
moto. Los moteros vamos en moto, y al volver, nos vamos a la terracita a comer.
Aquí dejo los próximos eventos para seguir conociendo
gente.
Gracias a las motos he conocido a grandes del
motociclismo, he ido cumpliendo sueños, y he ido alcanzando aquello que creía
imposible, y que se llama felicidad. -
Cristina Van Core.